El nombre de Wanda Nara volvió a aparecer en los medios después de que Mariano Iúdica, conductor del programa Polémica en el Bar (América), afirmara que la grabación del videoclip “O Bicho Vai Pegar” habría contado con la autorización del Comando Vermelho, una organización criminal brasileña.
Según Iúdica, el video, filmado en una favela de Río de Janeiro, se realizó con el “aval” del grupo, insinuando un contacto indirecto de la mediática con la banda.
Minutos después, el propio conductor moderó sus declaraciones y explicó que en producciones de gran magnitud, como videoclips internacionales o películas, es habitual obtener permisos locales para garantizar la seguridad de los participantes. Citó como ejemplos a Michael Jackson y la saga Rápidos y Furiosos, que también filmaron en favelas con aprobación de las autoridades de cada comunidad.
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Captura de pantalla
Frente a la repercusión del tema, Wanda Nara publicó en sus historias de Instagram capturas de su conversación con Evelin, la productora del videoclip. En los mensajes, Evelin le advierte: “Wan, ¿te das cuenta que nos quieren ensuciar en la TV, no? Todo eso que pasó en Río no tiene nada que ver con São Paulo, que es otra ciudad. Y la favela donde grabamos rescata gente de la calle para hacer música”. Wanda respondió: “Lo sé, todo viene de los mismos que instalan cosas que nada que ver”.
La productora también le sugirió aclarar públicamente que la filmación se realizó en São Paulo y que el proyecto incluía programas de rescate de niños mediante actividades musicales. Wanda compartió estos mensajes acompañados de un emoji de corazón, destacando que la producción se realizó en un marco artístico y solidario, sin vinculación con actividades ilegales.
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El videoclip “O Bicho Vai Pegar” fue presentado como el debut oficial de Wanda Nara en la música. Contrario a lo que circuló en televisión, la grabación no se realizó en Río de Janeiro, sino en una favela de São Paulo. La filmación contó con la coordinación de la productora local y medidas de seguridad para garantizar el desarrollo del proyecto artístico.
Captura de pantalla
La aclaración de Wanda Nara surge tras la circulación de versiones que vinculaban la producción con organizaciones criminales, información que fue replicada en medios y redes sociales. La empresaria insistió en que la iniciativa buscaba generar oportunidades para jóvenes de la comunidad mediante la música y que no existió ningún contacto con el Comando Vermelho.