La propuesta de Gran Hermano a Katia “La Tana” Fenocchio sorprendió a todos. Y es que, la participante viene expresando desde hace semanas su incomodidad dentro del juego. Por eso, el Big le ofreció la famosa puerta giratoria para que pudiera abandonar la casa en ese mismo momento.
Durante los últimos días, Katia se mostró agotada. Las coreografías, las pruebas y la rutina diaria del reality la dejaron al límite. “Es una forreada, yo me quiero ir, no quiero ni jugar la moto”, lanzó en una charla con sus compañeras. La frase dejó en claro que no estaba en su mejor momento.
Pero todo eso quedó de lado cuando GH habló directamente con ella. “No puedo retener a nadie, por eso te ofrezco la puerta giratoria”, le comunicó el Big. Por supuesto que todas las miradas se centraron en La Tana, que no dudó en contestar con firmeza. “Me quedo a seguir peleándola”, respondió sin dudar.
En el confesionario, Katia fue todavía más directa. “No soy una careta, si algo me molesta lo digo. Me explota la cabeza con tanto ritmo”, expresó, cansada de las exigencias del formato. Sin embargo, también remarcó que quiere irse “por la puerta grande, no por la giratoria”.
LA RESPUESTA DE LA TANA
La decisión del Big llegó después de varios episodios complicados con Katia. Ella se mostró apática en los ensayos, participó a desgano en las actividades grupales y hasta dijo que prefería volver a hacer delivery antes que seguir en la casa. La producción no lo pasó por alto y decidió actuar.
Finalmente, la participante oriunda de La Matanza eligió quedarse. Aseguró que va a intentar adaptarse mejor a la dinámica de Gran Hermano y que no quiere renunciar todavía. “Voy a tratar de mejorar el sueño”, dijo. Pero también advirtió: “No esperen que me quede callada”.