La K’onga hizo vibrar el Movistar Arena con una fiesta a puro cuarteto e invitados especiales

“Vamos a bailar cuarteto, Buenos Aires”. Con esa promesa, La K’onga comenzó su segunda noche en el Movistar Arena llena de baile, alegría y pura diversión, donde además celebró sus 21 años llevando el cuarteto “desde Villa Dolores (Córdoba) hasta el mundo”. El juego de luces, la escenografía colorida, la presencia de invitados especiales y la compenetración de la banda con el público hizo del encuentro una verdadera fiesta para todos.

Con un show que superó las dos horas, el grupo conformado por Nelson Aguirre, Pablo Tamagnini y Diego Granadé repasó su carrera a lo largo de más de 30 canciones, que incluyó varios de sus temas clásicos como “Te perdiste mi amor” o “La cabaña” -que los catapultó a escala nacional- e incluso algunos de sus lanzamientos más recientes que se convirtieron en himnos del cuarteto contemporáneo.

La fiesta de La K’onga sigue en el Movistar Arena

Poco después de las 21, apareció una cuenta regresiva en una de las pantallas. Cuando el reloj llegó a cero, el público estalló en gritos y hubo una lluvia de papeles que dio pie a “Te mentiría”, el primer tema de la noche y uno de los más sonados en el último tiempo.

Luego fue el turno de “Dueles”, “Si me dices que sí”, “Latidos” -que incluyó un momento destacado del acordeón-, “Necesito verte” y “Cinco minutos”. Todas las pistas estuvieron acompañadas de columnas de humo y fuego, así como un juego de luces que alternaba entre destellos coloridos y momentos más tenues donde las linternas de los celulares iluminaban el estadio.

Además, el entusiasmo de la audiencia era notable, siendo que acompañaba con las palmas (motivados también por los gritos de Granadé: “El que no hace palmas es un amargo”) y no faltaba quienes se ponían a bailar cuarteto en medio de las butacas. Incluso los propios músicos que acompañaban a la banda bajaban de los estrados donde estaban para moverse al ritmo de las canciones.

Le siguieron “Secretos” y “Yo quería”, donde se vivieron dos de los momentos más íntimos con el público. A pedido de La K’onga, se apagaron las luces del escenario, por lo que la gente comenzó a alumbrar con sus celulares, a lo que se añadieron columnas de fuego en los estribillos de las pistas. “Pero qué lindo se puso el Movistar”, exclamó Tamagnini ante la situación.

Tampoco faltaron «No se va«, «Ya me enteré«, «Perfecta«, «Otra noche«, «Y cómo es él» y «Por segunda vez«, alentadas por la banda que instaba: «A bailar Buenos Aires». «Si te vas» tuvo la particularidad de que el videoclip de la canción fue transmitido en las pantallas del escenario; mientras que en «Universo paralelo«, que hizo que todo el estadio se pusiera de pie para bailar, se mostraba el cosmos, en honor al nombre de la pista. Cuando fue el turno de «El mundo«, Sergio Dalma apareció en pantalla para acompañar a la banda.

Los invitados especiales y el cierre de la noche

Al iniciar la segunda mitad del show, todas las luces se apagaron, quedando únicamente iluminados en escena tres tachos a modo de tambores y sus respectivas baquetas con colores fluorescentes. De esa manera, se vivió un momento de percusión donde Aguirre, Tamagnini y Granadé agitaron aún más al público. Acto seguido, sonaron «Quieren matar al ladrón«, «Yo no te pido la luna» y «Convénceme«, para las cuales los tres integrantes de la banda alternaban entre el escenario principal y uno más pequeño, que tenía mayor cercanía con los espectadores.

Después llegó el primer invitado de la noche: Nicolás Sattler, de Q’ Lokura, a quien describieron como «un gran luchador» que lleva «muchos años con la música». «Me crie escuchándolos. Estar acá compartiendo este escenario es un placer. Me siento muy orgulloso, muy feliz», expresó Sattler, para luego entonar juntos «Volverás a mi cama» y «Mil preguntas«.

Una vez que el representante de Q’ Lokura se retiró, las luces se volvieron rojas e ingresó una bailarina de flamenco, que estuvo acompañada por unas rosas en las pantallas. Tras unos minutos, comenzó a sonar «Fama de Diabla» y apareció Emanero, el segundo invitado especial, con quien también cantaron «Adicto«.

«¿Nos vamos? ¿Están cansados?», preguntó la banda al terminar, ante lo que el público gritó que no. Con ese intercambio, comenzó la última tanda de la noche, que incluyó los favoritos de la audiencia. En ese tramo sonaron «Tengo que colgar«, para lo que la escena estuvo iluminada con reflectores de distintos colores, y «Te perdiste mi amor«. «Apagamos la banda y todas las luces», exclamó el grupo, por lo que la gente cantó el estribillo a los gritos mientras salían rayos de luces del escenario.

Al inicio de «Ya no más«, Aguirre tocó los primeros acordes con un ukelele y luego fue el turno de «El mismo aire«, mientras los distintos músicos que acompañaban se paseaban bailando por el escenario. Le siguió «La cabaña«, uno de sus mayores hits, que incluyó una coreografía donde los tres integrantes simulaban dicha construcción con los brazos.

Cuando finalizaron, estalló una lluvia de papeles, las luces se apagaron y el grupo se fue de escena tras agradecer al público, dando a entender que el show había terminado. Sin embargo, unos segundos después se oyó decir «una más» y comenzó a sonar «Ya no vuelvas«, uno de sus éxitos más recientes. «Gracias por escucharnos, por dejarnos entrar a sus casas cada día con la música. No saben lo lindo que es estar acá arriba. Nos vamos felices», expresó Tamagnini emocionado al final del evento, cerrando una noche de fiesta al ritmo del cuarteto.

La banda cordobesa agotó cinco funciones en el Movistar Arena, donde contó con otros invitados como Luciano Pereyra, Robleis y MYA. Luego de finalizar el festejo de sus más de dos décadas, La K’onga realizará una gira por Europa, donde tiene programados recitales en Irlanda, Portugal y en varias ciudades de España, incluyendo Barcelona, Murcia, Valencia, Málaga, Sevilla, Santiago de Compostela, Tenerife, Madrid y Bilbao. De esa manera, cumplirán con el objetivo que mencionó Aguirre durante el show: que su «música se conozca en otros lados».

Gi